Cuidados

Riego
El riego adecuado es esencial para mantener saludables las plantas de interior. Cada planta tiene sus necesidades específicas, por lo que es importante investigar y comprender sus requerimientos de agua. Generalmente, es mejor regar cuando la capa superior del sustrato está seca al tacto. Evitá el exceso de agua, ya que puede llevar a problemas de pudrición de raíces. Asegurate de utilizar macetas con buen drenaje y agua a temperatura ambiente para un cuidado óptimo.





Luz solar
La exposición adecuada a la luz solar es un factor muy importante en el cuidado de nuestras plantas. Cada una tiene sus preferencias, algunas requieren luz indirecta brillante, mientras que otras prosperan en luz directa. Observá las necesidades específicas de tus plantas y ubicalas en lugares que se ajusten a sus requerimientos lumínicos. Rotarlas periódicamente también ayuda a asegurar un crecimiento uniforme. Monitoreá la exposición solar para mantener tus plantas saludables y felices.

Temperatura
Para mantenerlas saludables, asegurate de que las temperaturas sean constantes y evitá cambios bruscos. Evita la exposición a corrientes de aire frío o calor extremo, ya que estas fluctuaciones pueden afectar su salud. Además, es crucial mantener una humedad adecuada, ya que muchas de estas plantas prosperan en ambientes más húmedos. Podés utilizar humidificadores o rociar las hojas de forma regular para mantener condiciones óptimas y asegurar un crecimiento saludable.

